lunes, 1 de noviembre de 2010

Cuando hablas

Me gusta cuando hablas
y rompes el silencio,
ese silencio odioso
que da los sufrimientos.

Me gusta cuando hablas
porque la vida ha vuelto
a florecer de nuevo
en tu espíritu y cuerpo.

De los momentos buenos
es el mejor momento...

Me gusta cuando hablas
porque tus ojos negros
parecen dos palomas
alegres en el viento.

Entonces yo... callado,
elevo el pensamiento.
¡No sé de que manera...!
¡No sé si es también rezo...!

Pero cuando tú me hablas,
y rompes el silencio,
detrás de esas palabras
a Dios siempre agradezco.

No hay comentarios:

Publicar un comentario