lunes, 1 de noviembre de 2010

¿Por qué?

Por qué me hiciste así, madre querida,
con este corazón tan alocado.
Él canta dulcemente enamorado
aunque tenga mi pecho alguna herida.

A veces llevo el alma dolorida
por motivos muy tristes que han pasado.
Pero él, jamás, jamás me ha preguntado
si arrastro alguna pena por la vida,

y va cantando alegre todo el día
viviendo en una eterna primavera,
sembrando por doquier su melodía...

En vano busco corregirlo un poco
porque no sabe andar de otra manera,
y ajeno a todo, canta como loco.

No hay comentarios:

Publicar un comentario