Si alguna vez, su cabeza,
quiere ponerse a pensar,
jamás deje progresar
esa chispa de grandeza.
Beba vino, alcohol, cerveza,
para que pueda lograr,
esa locura frenar
de tan sentida nobleza...
Si se detiene a pensar,
lo tildarán de extremista,
y lo pondrán en la lista
de gente sin trabajar...
Hágame caso, ¡resista!
aunque tenga que llorar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario